Es habitual ver empresas que vinculan estrategias de marketing a "causas solidarias". La implicación varía. Así, por ejemplo, todas las cotizadas disponen de un área dedicada a RSC desde donde parecen competir por ser la más innovadora en las acciones que ponen en marcha en lo social y medioambiental. También multitud de empresas de menor tamaño tienen interés en hacer sus marcas y productos más solidarios y sostenibles gracias a acciones de marketing con causa.
Lo que ya no es tan común son los proyectos que nacen con un enfoque de raíz humanitario, vinculando su acción empresarial a causas que son lo suficientemente potentes como para amparar toda su estrategia.

En España no existe mucha conciencia de las campañas mundiales de apoyo a la desaparición del orangután ("persona del bosque"). La razón principal de su acelerado exterminio se debe a la sobre explotación de su hábitat natural para cultivar aceite de palma, que sirve de base para muchos de los alimentos conocidos como "comida basura": La masiva deforestación afecta también a la desaparición de la capa de ozono.
Salvar al orangután es una causa que tiene tras de si un eficiente ecosistema de ong´s implicadas en defender la supervivencia de la especie, frenando la tala salvaje su mundo en las selvas de Borneo.
Así que visto lo bien que me sentaban, que no eran muy caras y que además comprándolas aportaba un granito de arena a apoyar causas en las que creo, no lo dudé. Ahora cuando las uso tengo un motivo de conversación y puedo ayudar en la sensibilización de este problema.